Siempre recordaré el primer día que ví a la Señora de Sevilla.Tengo que retrotraerme al año 2001, tenía yo 19 años y empezaba a descubrir la majestuosidad de la Semana Santa sevillana, era un Domingo de Ramos por la mañana y me dejó completamente bloqueado.No podía imaginar nada más hermoso, me golpeó con su belleza y solemnidad haciéndome sentir como en un amor adolescente. Desde entonces ELLA tiene un sitio en mi habitación donde puedo seguir admirandolá cada día.
Después de eso Sevilla y su Semana Mayor corren por mis venas y nunca dejarán de hacerlo.
Yo salgo de costalero en la madrugá cordobesa pero cada año procuro hacer el esfuerzo de no irme a la cama a descansar. Suelo coger el tren de las 7:30 a Sevilla y voy a ver a la Señora a su paso por el convento de Santa Ángela de la Cruz.Siempre es igual pero siempre diferente, no hay año que no me emocione.
Si señor, gran momento de la Madrugá, aunque este año disfrute como un niño chico, la acompañe desde Omnium Santorum a Escoberos, fue algo especial e inolvidable.
Hace dos madrugás, la vi por los callejones de su barrio y a los sones de Macarena de Cebrian, sin palabras. Cad madrugá es diferente, la proxima si Dios quiere, pretende verla no tan de dia.
Momento mágico siempre es verla con las primeras luces del alba, es esa luz especial del Viernes Santo muy de mañana que se puede contemplar desde el Salvador a la puerta de la Anunciación se viven momentos innenarrables junto a Ella para los que nos consideramos Macarenosy verdaderos cofrades, propiciando esto nuestro fisico cansado azotando nuestras espaldas y la nostalgia de algo que se nos va de las manos, esperado durante tanto y a la vez inabarcable
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...animo...este año si que ...
5 comentarios:
Por qué será que hoy a todos nos ha dado por lo mismo...??
Siempre recordaré el primer día que ví a la Señora de Sevilla.Tengo que retrotraerme al año 2001, tenía yo 19 años y empezaba a descubrir la majestuosidad de la Semana Santa sevillana, era un Domingo de Ramos por la mañana y me dejó completamente bloqueado.No podía imaginar nada más hermoso, me golpeó con su belleza y solemnidad haciéndome sentir como en un amor adolescente. Desde entonces ELLA tiene un sitio en mi habitación donde puedo seguir admirandolá cada día.
Después de eso Sevilla y su Semana Mayor corren por mis venas y nunca dejarán de hacerlo.
Yo salgo de costalero en la madrugá cordobesa pero cada año procuro hacer el esfuerzo de no irme a la cama a descansar. Suelo coger el tren de las 7:30 a Sevilla y voy a ver a la Señora a su paso por el convento de Santa Ángela de la Cruz.Siempre es igual pero siempre diferente, no hay año que no me emocione.
Un abrazo.
Si señor, gran momento de la Madrugá, aunque este año disfrute como un niño chico, la acompañe desde Omnium Santorum a Escoberos, fue algo especial e inolvidable.
Hace dos madrugás, la vi por los callejones de su barrio y a los sones de Macarena de Cebrian, sin palabras. Cad madrugá es diferente, la proxima si Dios quiere, pretende verla no tan de dia.
Un saludo
Cuando se le mira a los ojos, uno no tiene dudas de que Ella es la Madre de Dios.
Momento mágico siempre es verla con las primeras luces del alba, es esa luz especial del Viernes Santo muy de mañana que se puede contemplar desde el Salvador a la puerta de la Anunciación se viven momentos innenarrables junto a Ella para los que nos consideramos Macarenosy verdaderos cofrades, propiciando esto nuestro fisico cansado azotando nuestras espaldas y la nostalgia de algo que se nos va de las manos, esperado durante tanto y a la vez inabarcable
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